REHACER TU VIDA CON UN HIJO DE POR MEDIO

REHACER TU VIDA CON UN HIJO DE POR MEDIO.

Creo que varias de nosotras vivimos en una etapa en la que los divorcios están a la orden del día, y que la oportunidad de rehacer tu vida con otra persona que DE VERDAD (enfatizo) entienda esta situación, está dentro de nuestras listas de posibilidades y que quizá se pueda intentar, pero ¿hasta cuándo es válido?, digo quizá me esté expresando mal, pero ¿cuándo es buena idea si hay un hijo de por medio?, quizá la decisión la tenemos difícil, porque para nosotras que tenemos una familia unipartental (mama e hijo o papa e hijo, éste último demasiado difícil pero existe) no es muy viable la opción de que la edad no importa y que siempre es bueno empezar de nuevo.

 Tenemos muchas cosas que cuidar, sobre todo si nuestro hijo o hija aun está en contacto con el padre biológico, cuando venimos de un divorcio o de una separación, cuando se viene de una muerte de uno de los cónyuges, si el hijo es muy chico o muy grande para entender, cuantas cosas hay en juego. No digo que esté mal rehacer tu vida, porque al final como siempre digo, los hijos crecen y se van “son prestados” (como diría mi mama) y pues nosotras quedamos como empezamos y peor porque la edad y el tiempo no perdonan; pero tampoco con tal de no estar solas o rehacer nuestras vidas con premura, vamos a someter al hijo a una situación difícil y complicada, al menos estoy hablando de nuestro lado; pero que tal del lado de nuestra “pareja”, que tal si no le gustan los niños, que tal si a nuestro hijo no le agrada su compañía digo al final de cuentas el que agrade o no dependerá de la pareja si es que estamos hablando de un niño menor de 11 años; y que tal si no conocemos suficiente a la persona y no es quien creemos que sea, y termine lastimando a nuestros hijos y lo que es peor que eso, que te ciegue el amor y no lo reconozcas porque “no lo creías capaz”, nadie está exento de ello, y al final y siempre al final el que termina perdiendo más y el que sale más lastimado es la criatura, y sobre todo y lo más importante el ejemplo de vida que le estemos dando a un ser que depende directamente de nosotras. Miren que me he sentado de verdad a platicar sobre este tema, con varias personas, desde personas casadas, hasta personas que tiene 2 hijos y se han casado por tercera vez, si!, por tercera vez; todas y cada una de estas personas en posturas y puntos de vista de diferentes.

 Una persona casada, jamás va a tener en la idea de rehacer su vida con otra persona que no sea el papa de sus hijos (hasta que no llegan al punto donde estoy les diría después), más sin embargo se han atrevido a opinar al respecto diciendo una verdad absoluta y real, una ley universal en la materia opino, un axioma (me proyecto), “la persona que quiera hacer vida con una mujer con hijos a los que deben enamorar primero son a los hijos, indirectamente y directamente, pues a una madre soltera que de verdad le importen sus hijos sólo por ahí la ganas más lo que implica una relación normal como los detalles y esas cosas”… así, cité al pie de la palabra (me sorprende la retentiva que tengo a veces) sólo si la intención de la mujer es de verdad cohabitar de nuevo y darse esa oportunidad románticamente escribiendo de envejecer con alguien que quiera mucho o ame mucho y viceversa.

 Porque ahora paso a otro punto, las mujeres recién divorciadas (menos de 2 años) con las que he platicado del tema en un café son más renuentes al respecto, y prefieren las aventuras de una noche, los novios eternos sin meter a los hijos, evadir de nuevo la responsabilidad de una relación, como vulgarmente se dice “de lejitos mejor”, pero bueno luego pienso, ¿Qué pasa después?, no termina una sintiéndose más sola, o “usada” bueno al menos eso pienso, cabe señalar que esto no lo platico con mujeres menos de 20 nooooooooo, son mujeres maduras, preparadas, con hijos, independientes de un promedio de 36-40 años, una mujer que piensa así (sin juzgar) puede depender mucho de qué tipo de matrimonio está saliendo digo en algún momento lo pensé cuando recién me divorcie “¿yo, jamás, volverme a casar?”, lo clásico.

 Ahora están las que piensan en la oportunidad de rehacer una vida con alguien que las ame, las quiera, las proteja, les dé una seguridad, las que quieren de nuevo rehacer su vida “como dios manda”, pero por una razón u otra, son las que menos suerte tienen y pasa el tiempo hasta que se acostumbran a la idea de estar solas y dedicarse a los hijos, ¿Por qué pasa el tiempo?, porque por lo regular es la que piensa que son dos paquetes al precio de dos paquetes, o con los dos paquetes o nada. Entonces en otra plática escuché, otra razón “nadie, ni una persona va a querer a un hijo ajeno como suyo”, cosa en la que no estoy de acuerdo del todo, digo después de todo hay mujeres que tienen un segundo matrimonio que es más sólido donde el hijo mayor (por lo general), no es hijo biológico y no hay diferencias al respecto, se hizo cargo como si fuera suyo, el ejemplo y la plática la tuve aquí, en mi escritorio de mi oficina, sobre todo esta última.

 Cualquier relación de amor, no se da, se construye. Escuche la palabra “complicada” muy seguido durante el último mes o al menos al principio de este mes, y si, doy toda razón, es complicado para nosotras rehacer nuestra vida cuando hay un ser que depende de nosotras, y si es muy complicado para la pareja que se avienta al ruedo y a la tarea de ganar a mama e hijo, 1 de cada 10 hombres (estoy calculando) son los que se avientan de verdad. 

Porque ahora por otro lado tenemos a las mujeres desesperadas en la premura de no quedar solas, se meten en una relación y en otra y en otra y en otra, y con ello meten a las criaturas, de relación en relación, hasta llegar al punto de un desequilibrio en el que descuidar esa parte de ti, que depende de ti se vuelve un caos (conozco un caso ), y que hasta que no te llamen de la escuela de tus hijos; o tus hijos estén en un problema de conducta social sólo para llamar la atención de la mamá (hablo de una niña de 6-8 años), sólo hasta ahí te das cuenta que obviamente algo estás haciendo mal, y “se aquietan” por un tiempo y cuando los hijos están “ya bien o mejor”, vuelven de nuevo a ese tipo de vida de vaivén, obteniendo nada más que el fracaso en su vida sentimental y en la de sus hijos. (Me acorde ella…).

Y hasta donde alcance platicar, están las mujeres que de plano dicen “NO”, y se aferran y dedican tanto a los hijos que se olvidan de sí mismas, digo tampoco está mal, pero al final de cuenta somos seres humanos, y no se dan cuenta hasta que el hijo o hija emprende vuelo (estudia en otro lado, se casa, se va de casa) y es ahí donde voltean y dicen “¿y luego...?. Quizá llenen ese vacío con un nieto, pero ¿y si no? Y con ello llega la edad, la vejez y la costumbre a la soledad.

 Espero con este post, no ofender a ninguna lectora en mi situación. Digo al final de cuentas mi intención sólo es compartir un punto de vista y la diversidad de pláticas con mujeres como tú que me estás leyendo, y puedo aventarme más pero bueno hasta aquí llego.

 Y en mi humilde opinión, abre bien los ojos sobre a quién dejas entrar a tu vida y a la vida de tu hijo o hija, por que como se dice “una como quiera pero ¿y las criaturas?, no está mal estar disponible de nuevo al amor, es algo tan lindo, pero es más hermoso cuando ninguno de los involucrados queda fuera o se ve afectado, y sobre todo cuando esa persona no te da incertidumbres, no hay desbalances. Me tardé creo 2 días con este post. Ojalá que lo haya disfrutado y si no, al menos hayan reflexionado.

 Te saluda Mabel.

esta vez trataré de dejar información acerca del tema como siempre lo he hecho Saludos.

mama ennoviada
sola con hijos